Más de 100 ayuntamientos, entre ellos el de Cabezón de Pisuerga, han colocado en sus fachadas una pancarta de apoyo a la marcha del pasado 7 de Noviembre en Madrid, donde decenas de miles de personas se han manifestado en la primera gran movilización estatal contra las violencias machistas, una marcha convocada por el colectivo feminista a la que se han sumado la mayoría de los partidos políticos, sindicatos y numerosos colectivos, para pedir que la lucha contra el «terrorismo machista» sea una cuestión de Estado.
La Marcha contra las violencias machistas del 7N ha exigido el cumplimiento de los siguientes puntos en su manifiesto:
- Que la lucha contra el terrorismo machista sea una cuestión de estado.
- Que se desarrolle e implemente el Convenio de Estambul y el cumplimiento de las recomendaciones de la CEDAW, y se reforme la ley 1/2004 para que estén reflejadas todas las formas de violencia contra las mujeres.
- Que toda la sociedad y sus organizaciones e instituciones se comprometan en esta lucha.
- Que la lucha y los recursos incluyan tanto la violencia que ejerce la pareja o ex pareja como las agresiones sexuales, el acoso sexual en el ámbito laboral, la trata con fines de explotación sexual/laboral de mujeres y niñas y todas las violencias machistas.
- Que todas las instancias de gobierno se comprometan realmente en la prevención y erradicación de las violencias machistas, así como en la asistencia y reparación de todas las mujeres en situación de violencia, independientemente de la situación administrativa en que se encuentren las mujeres.
- Que el acento se ponga en la protección de las afectadas, facilitando diferentes salidas que impliquen una verdadera recuperación vital, económica y social de ellas así como de sus hijos e hijas.
- Que la prevención sea una política prioritaria, que incluya un sistema coeducativo en todos los ciclos, la formación específica para todo el personal profesional que interviene en los procesos, los medios de comunicación, la producción cultural y la sociedad civil en la lucha contra las violencias machistas.
- Que los medios de comunicación se comprometan a hacer tratamiento adecuado de las diferentes de violencias machistas, visibilizándolas, evitando el sensacionalismo morboso en su tratamiento y utilizando un lenguaje y unas imágenes no sexistas.
- La eliminación de la custodia compartida impuesta y el régimen de visitas a los menores de los maltratadores condenados. La retirada y no cesión de la patria potestad a los maltratadores.
La pancarta de cabecera de la manifestación tenía el lema «contra las violencias machistas» sostenida por supervivientes de la violencia de género cubiertas con máscaras, como Ana (nombre ficticio) que se ha cubierto de blanco la cara porque afirma, «si no se pierden en el más absoluto anonimato, cosa que con hijos es muy difícil, en este país, las mujeres están completamente desprotegidas». «Del imponer sale el pegar y matar», «Nos queremos vivas, basta ya», «No es moral, ni es amor, el maltrato soportar», «El machismo es un crimen contra todos», «Machismo, cobarde terrorismo», «La violencia no tiene género», «016. Denuncia el maltrato», «Nos están matando» o «Educación machista, ni a chicos ni a chicas» son algunos de los lemas de las pancartas que portaban los asistentes. Y, mientras, los asistentes han coreado «Si tocan a una, nos tocan a todas», «Disculpen las molestias, nos están asesinando», «¡No estamos todas, faltan las muertas!».
«Desde el año 1995, 1.392 mujeres han sido asesinadas por el terrorismo machista. En lo que llevamos de año, se han contabilizado 84 feminicidios y otros asesinatos de mujeres cometidos por hombres. Sólo en el verano de 2015 han sido asesinadas 37 mujeres y ocho menores a manos de sus parejas, padres o parejas de sus madres. Mujeres y menores sufren violencia patriarcal en múltiples formas y esto sólo es la punta del iceberg», dice el manifiesto, cuyos datos no coinciden con la estadística oficial del Gobierno.