Esta semana han comenzado los trabajos de apertura de la denominada Puerta de Difuntos en Santa María de Palazuelos, esta intervención está incluida dentro de la 2º fase de pavimentación del entorno del monasterio de Palazuelos, obra subvencionada por la Junta de Castilla y León.
Estado de la puerta de Difuntos previo a los trabajos de apertura
El lado norte Palazuelos posee un vano cegado, que se corresponde con la puerta que hasta el siglo XVI permitía el acceso al cementerio de los monjes desde el interior del templo. La apertura de la nueva puerta de acceso a la iglesia por Juan de Nates, hizo que esta se anulara.
Ahora y, para facilitar la accesibilidad, se reabre este vano que presenta estructura gótica con elementos decorativos románicos (una cabeza humana en la coronación del arco) y en la que se intuyen la presencia de capiteles en sus laterales.
Es muy probable que para rellenar esta puerta se utilizaran materiales pétreos provenientes del gran derrumbe que sufrió el templo en la segunda mitad del XVI y que fue el que provocó toda la serie de intervenciones de Juan de Nates en el monasterio. Por ello se hace imprescindible la realización de un Control Arqueológico de los trabajos de apertura de este vano y la recuperación de los posibles elementos decorados reutilizados en esta obra.
Los trabajos que se están realizando incluyen la eliminación del relleno tapiado de la llamada “puerta de difuntos” del muro norte. La demolición se realizará de forma manual, y por personal especializado, con seguimiento arqueológico. En cuanto a lo hallado, se prevé una restauración sencilla a base de mortero de cal y resina, para la colocación de marco y puerta de madera de pino lisa, para no introducir un nuevo material de carpintería, con el mismo teñido que la puerta actual. Si fuera necesaria una restauración más profunda de los elementos encontrados, serán objeto de otro proyecto, ya que en esta fase no tenemos conocimiento del resultado de los posibles hallazgos, ni del estado, ni de la composición del arco original.
Estado de la puerta después de los primeros trabajos de apertura.
Figura encontrada entre los escombros utilizados para cubrir la puerta.